jueves, febrero 23, 2006

Gallego soy



El último fin de semana que estuve en Lugo (hace 15 días) un amigo que trabaja en Madrid apareció con un colega americano llamado Steven, de Rhode Island. Un tipo majo y muy interesado por nuestras costumbres. Por poner un ejemplo, el sábado por la mañana nos pidió si podíamos visitar el mercado de la ciudad, para poder ver las cosas que comemos, a la gente en su ambiente natural, los productos de nuestra tierra. Como era de esperar cuando pasamos al lado de un puesto en el que colgaban varias "cacholas" de cerdo se quedó pasmado. Pero mostró respeto como la persona educada e inteligente que es.

Después lo llevamos a la calle de los vinos para tomar algo y nos metimos en el bar "A Nosa Terra" para invitarlo a una tapa de orella. Cuando vió lo que era pidió disculpas por no tener coraje para probarla y se decantó por la empanada.

Este carnaval, como es tradición en mi familia, mi madre, mis tías y mi santa abuela Josefina prepararán un cocido de agarrate que vienen curvas para al menos 25 comensales. Con papatas cocidas, grelos, garbanzos... y con orella, morro, lacón, botelo, chorizo y demás sabrosos ingredientes que nos regala ese animal sagrado al que injustamente bautizaron con el nombre de cerdo. Sólo de pensarlo se me cae la baba. No me lo perdería por nada del mundo.

2 Comments:

At 11:20 p. m., Blogger William said...

Que envidia, tio!

 
At 12:20 a. m., Blogger Sr Blas said...

Y no defraudó amigos. Mención especial para el botelo y la cachola. Gracias amigo cerdo, gracias.

 

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