jueves, junio 16, 2005

Las dos caras de SIN CITY



La falta de ideas en el cine americano ha llevado a que últimamente se busquen historias interesantes en el mundo del cómic. Siempre ha existido colaboración y trasbase de ideas pero nunca la unión había sido tan fructífera como en los últimos años. Los dos SPIDERMAN, los X-MEN, HULK, la saga de BATMAN (proximamente estrenarán BATMAN BEGIN con Christian Bale interpretando a Bruce Wayne), DARDEVIL, ELEKTRA y un largo etc.

Incluso hay quien ha hecho películas que son verdaderos homenajes al mundo del cómic y especialmente al de superheroes (véase EL PROTEGIDO de M.Night Shyamalan, PERSIGUIENDO A EMY de Kevin Smith, o AMERICAN SPLENDOR de Shari Springer Berman y Robert Pulcini por poner tres ejemplos).

El gran maestro Frank Miller, uno de los más importantes autores americanos de la historia ha colaborado con el irregular Robert Rodríguez para adaptar y llevar a las salas de cine una de sus obras más míticas: SIN CITY. Se podría abordar el proyecto de multiples formas pero sin duda la más arriesgada es por la que finalmente se han decantado: intentar llevar el cómic como formato a la gran pantalla.

Si bien otras películas del género se aprovechan de los efectos especiales para mostrar espectáculo, para hacer que los hombres vuelen, trepen por las paredes o lanzen rayos mortales, SIN CITY hace uso de ella para plasmar con más que notables resultados lo que es un cómic de estas características visto en la pantalla del cine. Así, los personajes están genialmente caracterizados. Algunos incluso absolutamente irreconocibles, pero siempre fieles al original en papel. Mención especial merece Mickey Rourke interpretando a Marv: simplemente está genial y su personaje es lo mejor de la película.

Los escenarios oscuros y húmedos, lo grotesco de los personajes, la violencia exagerada y sobre todo la forma de presentarla, las mujeres peligrosas con curvas de infarto, los villanos deformes, los heroes románticos hasta el extremo, las luces y sombras imposibles... Todo en la película es un cómic. Y la fotografía está perfecta consiguiendo que muchos de los planos se conviertan en verdaderas viñetas, llegándolas a disfrutar igual que si Frank Miller te las hubiese dibujado.

Y ahí es donde están las virtudes y defectos del film: sus dos caras. A quien le guste el cómic, quien haya leido esta obra u otras del autor (por ejemplo el DAREDEVIL de principios de los 80), en definitiva a quien esté habituado a esta forma de expresión, le gustará y disfrutará de ella. A quien no haya mostrado jamás interés por el tema, no le guste o simplemente no sepa ni que existe, le chocará mucho y es muy probable que no le guste nada.

Por cierto, Quentin Tarantino participa como director invitado. No sé a ciencia cierta que partes rodó pero tengo mis sospechas sabiendo del interés que tiene ultimamente con las chicas guapas con espada. Dará para el debate con copa.





Y ya que hablamos de este tema espero con impaciencia el estreno de V DE VENDETTA, adaptación de uno de mis cómics favoritos, obra de Alan Moore. Es otra historia que se presta para hacer algo bueno. Y con Natalie Portman de protagonista.