domingo, marzo 25, 2007

The Fountain



Es muy difícil, por no decir imposible, ver una película en estado "neutro", sin dejarse influenciar por las expectativas que uno tiene en función del director, el guionista o los actores que en ella participan, y al mismo tiempo y de igual forma es muy complicado abstraerse del estado mental con el que uno entra en la sala de proyección. Así, no es lo mismo ver un film cuando uno está radiante de felicidad que verlo cuando anda con la moral un poco baja. Y de la misma manera no se entra con la misma disposición a ver una película dirigida por los hermanos Coen, por poner un ejemplo, que la que se tiene con otra dirigida por alguién con el especial curriculum de Darren Aronofsky.

Hasta la fecha servidor había visto 2 películas del interesante director americano: Pi, del año 98, rodada con apenas 60.000 dólares y que resultó ser una de las sorpresas del año por la originalidad de su guión y, sobre todo, la obra maestra que es Requiem For A Dream (2000), una sobresaliente historia que narra el descenso al infierno en el amplio sentido de la expresión que se asocia invairablemente a cualquier adicción cuando se vuelve incontrolada: uno de los films más brillantes e impactantes que haya visto en los últimos diez años. Pero Aronofsky no es un director fácil y sus estrenos siempre se acompañan de polémica. Asi fue entonces y así lo es ahora.

The Fountain se estrenó en el Festival de Venecia y la crítica mayoritariamente la destrozó. Dependiendo del día yo también sería capaz de decir horrores de la complicada historia que nos propone: podría decir que es un bodrio pretencioso, una mamarrachada sin sentido o incluso que se trata de un infantil cuento sin pies ni cabeza. Pero tenía yo el día para verla con los ojos necesarios y me dejé llevar por sus imágenes, por su música (compuesta una vez más por Clint Mansell e interpretada por The Kronos Quartet y los guitarristas de Mogwai), me emocioné con su historia de amor imposible, me dejé llevar por la terrible tristeza que la envuelve de principio a fin, y me dejé arrastrar por ella y fue asi que la disfruté como un enano.

Aviso a navegantes: no se la recomiendo absolutamente a nadie porque estoy casi seguro que a casi nadie gustará. Y juro por dios que lo entiendo perfectamente.

Trailer


3 Comments:

At 5:09 p. m., Blogger El Gran Mimón said...

Blas. Ya se venden las entradas para Los Planetas en el Capitol.

 
At 4:34 p. m., Anonymous Anónimo said...

Liles:
Ese día me vale para vernos. Tú hermano y yo ya tenemos las entradas. Vente y te hago una oferta de no-trabajo que no podrás rechazar

 
At 5:13 p. m., Blogger Sr Blas said...

Ya me tarda esa oferta.
Iré a Santiago con El Gran Mimon (creo), y si no voy solo.

 

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